Contra todos

Solo contra todos sigue la tendencia actual del cine de acción norteamericano centrada en ofrecer clones de John Wick con el infaltable protagonista parco que protagoniza alguna historia de venganza.

 La propuesta gestada por la productora de Sam Raimi representa la ópera prima de Moritz Morh, quien se desempeña como un imitador serial de trabajos ajenos.

Más allá de Wick el film roba elementos de numerosas producciones que van desde Kick Ass, hasta Crank, Hardcore Henry  y Smokin Aces.

La historia no tiene el menor sentido por el simple hecho que el director busca plantarse como un loquito excéntrico.

Hace poco el cine suizo presentó una propuesta similar en Mad Heidi, una continuación lisérgica de la clásica historia de la niña de los Alpes que al menos fue más creativa a la hora de evocar el cine Grindhouse clase B.

En defensa de Morh es justo mencionar que demuestra tener talento para la ejecución de las secuencias de acción.

Desde los aspectos técnicos no le se puede objetar nada a las coreografías de peleas y las secuencias de tiroteos que se presentan con un trabajo limpio y estilizado en materia de realización.

Creo que el desafío que tendrá este director a futuro pasará por desplegar sus virtudes en el tratamiento de la acción dentro en un proyecto que tenga una mayor identidad artística.

Dentro del reparto Bills Skarsgard presenta un desempeño físico decente como héroe de acción en un rol limitado donde el argumento tampoco le permite hacer algo diferente con su personaje.

El diálogo interno del protagonista que es mudo es interpretado en una narración en off por H.Jon Benjamin, recordada voz de series de animación de culto como Dr.Katz y Bob´s Burger.

El chiste que en un principio resulta gracioso luego se vuelve irritante bido al modo en que el director explota ese recurso.

Mad Dog Ruhian de The Raid aparece en un momento como un chamán y le aporta un poco de simpatía a un relato ruidoso y redundante que tiene poco para ofrecer más allá de la orgía de violencia extrema y el humor bobo típico de un preadolescente que se pasó de rosca con una bebida energética.

Si con ese contenido te alcanza para entretenerte entonces la vas a pasar mejor que yo con una experiencia más satisfactoria.

En mi caso no me terminó de convencer.

Dentro de los clones de John Wick que aparecieron en los últimos años este es por lejos uno de los más flojos debido a su vagancia creativa y falta de imaginación a la hora de elaborar un cuento de venganza.