El musical nos traslada a una década después del "Fantasma". Christine Daaé es invitada a actuar en "Phantasma", una nueva atracción en el parque de Coney Island, por un empresario anónimo. Con su marido Raul y su hijo Gustave a cuestas, viajará a Brooklyn, sin saber que es el propio Fantasma [...]
Me gustó tanto como la primera parte. Es una joya para todos a los que nos encantan los musicales. Totalmente recomendable.