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Una decepción enorme. Es muy notorio que la dirige un realizador primerizo por la torpeza con que está narrada, el guion es pauperrimo y la edición frenetica y abrupta. La mayoría del casting es un desastre, desde Raiden, Sonya o Liu Kang, Kano infumable con las referencias pop y el nuevo personaje y protagonista, Cole Young es terriblemente insulso y cuesta empatizar con él. Los unicos personajes grosos de esta historia son Sub-Zero y Scorpion que tienen las mejores escenas, una lastima que tengan una participacion limitada. Tambien rescato los primeros diez minutos y la ultima media hora que remonta pero el resto es un plomazo terrible. La película animada de hace un año es muy superior.

Nomadland es una propuesta extremadamente minimalista y muy común de encontrar dentro del cine independiente más puro. Acá no hay una trama con un complejo desarrollo, de hecho si no fuera por los créditos finales uno no notaria cuál es el comienzo y cuál es el final porque no hay una gran diferencia entre ambos. Al igual que en The Rider, la película anterior de la directora Chloé Zhao, se aborda la historia casi como si fuera un documental aunque en realidad sea una obra de ficción con mucho de realidad, como los personajes que van desfilando a lo largo del film. No es una película para todo el mundo, lo que más destaco es la sensible interpretación de Frances McDormand llena de matices.

Una divertida propuesta que combina las comedias de enredos donde dos personajes intercambian sus cuerpos y las slashers de asesinos seriales (en especial la saga de Jason Voorhees). Y funciona en ambos aspectos, con climas de tensión y asesinatos creativos con mucha carga de humor negro. Pero nada de esto importaría si las interpretaciones de sus protagonistas no nos hicieran creer que una joven y cohibida adolescente y un psicópata cuarentón cambiaron de identidad y efectivamente ambos están excelentes, sobre todo Vince Vaughn que le toco la parte más difícil. La trama exagera un poco el tono sentimental y empoderado, pero si buscan una comedia de terror Freaky es muy recomendable.

Un festival de clichés policiales con muy poco para destacar. Los primeros minutos despiertan cierto interés por ver como se va a desenvolver la historia, pero enseguida se disuelve todo para caer en todos los lugares comunes posibles. En cuanto al elenco Rami Malek está correcto y nada más, Jared leto sobreactúa y desentona por completo (totalmente inexplicable la nominación al Globo de Oro) y Denzel Washington le saca agua a las piedras y le pone una voluntad a su interpretación que es lo único que separa al espectador de rendirse al sueño que provoca Pequeños Secretos. Una película demasiado larga, aburrida y olvidable.

Un espectáculo digno de lo que representa semejante encuentro entre los dos monstruos más antológicos del cine. La primera media hora consiste en presentar el conflicto y todos los personajes, una vez establecida esta cuestión la película maneja un ritmo frenético que va en aumento hasta llegar a la última media hora que directamente es una hermosa fiesta pochoclera con un par de momentos merecedores de aplausos. No está libre de defectos, ciertos personajes no aportan demasiado a la película y la edición se siente apresurada, sobre todo en el desenlace. Pero estamos ante uno de los grandes eventos cinematográficos del 2021 y un perfecto cierre del monsterverse de Warner que comenzó en 2014.

Otro de esos casos donde no termino de comprender/compartir los palazos que recibe una película. Los Nuevos Mutantes no es excelente, tampoco muy buena, ni está libre de defectos, pero sin ir muy lejos Dark Phoenix fue mucho peor. Esta por lo menos tiene una historia más llevadera y algunas interpretaciones decentes, sobre todo Anya Taylor-Joy que con su personaje rebelde e incorrecto es lo mejor de la película. La trama es muy fácil de adivinar para adonde va y no hay muchas relevaciones y dentro del extinto universo mutante del estudio Fox no es uno de los puntos álgidos, pero cumple como entretenimiento pasatista. Eso sí, no esperen una historia que cause miedo porque está lejos de eso.

Una película que juega todo el tiempo a dos frentes, por un lado el humor negro y por el otro el thriller con denuncia social incluido. Y no termina de convencer en ningún sentido porque no es tan graciosa como aparenta y no se la termina de jugar cuando apuesta a una temática más violenta si se quiere. Estamos ante otra propuesta de índole feminista que cae en el lugar común de retratar a todo el género masculino como la peor inmundicia sobre la faz de la tierra, pero que por lo menos no resulta tan malo como otros exponentes de este infame subgénero y en esto tiene mucho que ver la cautivante e inusual interpretación de Carey Mulligan que levanta la historia en varias oportunidades.

Sinceramente no daba dos mangos y fue una grata sorpresa. Es prácticamente en todos los aspectos una versión muy superior al corte de 2017. Para ser un mamut de 4 horas de duración no se siente que sobren escenas o que se extienda innecesariamente la trama, al contrario, el tiempo en pantalla sirve para desarrollar de manera enriquecedora a todos los personajes y darle una coherencia y cohesión a la historia que antes no tenía. Un avance gigante si la comparamos con el desastre que resultó Batman Vs Superman. En contra tiene los vicios de siempre del director, la cámara lenta y las canciones pretenciosas, Flash sigue siendo terrible nabo. Sin dudas la película más sólida de Snyder con Dc.

Un prólogo prometedor en Themyscira, una divertida secuencia en un shopping que no le teme al humor campy y una inspirada música de Hans Zimmer, eso es todo lo que se puede destacar de esta secuela. El resto es una historia incoherente, forzada y demasiado larga que se apoya en el típico macguffin que cumple deseos. Las escenas de acción son escasas y en cambio hay una trama más a tono con una novela brasileña que a una película de superhéroes, poco Wonder Woman y mucho Diana Prince. Chris Pine mira el celular para saber cuando cobra el cheque y Pedro Pascal está sobreactuado. La participación de Kristen Wiig resulta más digna. Ojalá salga algo mejor en la ya confirmada tercera parte.

Cuesta creer que en esta película estuvo involucrado los talentos de Robert Zemeckis, Guillermo del Toro y Alfonso Cuaron. La mayor parte del tiempo este remake se limita a refritar lo que ya se vio (y mucho mejor) en la adaptación anterior. El predecible CGI es muy inferior a la artesanía de los animatronicos. Sorprende la limitada participación de las brujas del título, salvo por la líder interpretada por una Anne Hathaway que sobreactúa todo el tiempo y hace que uno extrañe demasiado a Anjelica Huston. Lo único que se puede destacar de esta película es el final mucho más fiel a la obra de Roald Dahl, a diferencia del desenlace fumado en la versión de los '90, nada más.