D +
Nadie puede negar que Al Pacino es una de las grandes
leyendas de la actuación que existen en el cine.
Como olvidar sus trabajos memorables en El Padrino, Serpico,
Scarface o Fuego contra fuego.
88 minutos es una de las películas más flojas
que tiene su filmografía, pero él logró
salir bien parado, pese a que su personaje es un disparate
y ni siquiera presenta una de sus mejores interpretaciones.
En realidad este es un estreno que debería haber comentado
en mi blog, en la sección Películas malas que
divierten, dedicada al cine clase B. El único motivo
por el que este estreno llegó a los cines es que trabaja
Pacino, si no hubiera terminado en el cable directamente.
El director Jon Avnet hizo buenas películas dramáticas
en el pasado como Tomates verdes fritos y El árbol
de los sueños (Kevin Costner) pero en el género
del thriller fracasó al tratar de emular un capítulo
de la serie 24 en el cine.
Más allá que Kiefer Sutherland es un gran actor
y los directores que laburan en ese programa la tienen clarísima
a la hora de crear buenos climas de suspenso, la clave de
24 es que tiene muy buenos guiones.
No es el caso de 88 minutos que presenta una historia mediocre
y mal ejecutada con una trama repleta de cosas sin sentido.
Por ejemplo, Pacino es un profesor universitario que trabaja
para el FBI como psiquiatra forense. Desde el momento en que
el asesino le dice por teléfono que le quedan 88 minutos
de vida antes de ser asesinado, el tipo se transforma en John
McClane (Duro de Matar)!
Cómo es posible que un tipo que se pasó toda
la vida detrás de un escritorio se convierta en instantes
en un héroe de acción y se maneje a la perfección
con las armas.
Otro punto. Todas las mujeres que aparecen en la historia
(especialmente las alumnas del profesor)están buenísimas
y todas desean encamarse con el personaje de Al. Llega un
momento en el que es imposible no reírse de las ridiculeces
que plantea la trama.
Encima se suma que el director Avnet se empeñó
en mostrar como sospechoso a cada personaje que aparece en
la película , luego que el protagonista es amenazado.
El recurso se repite tanto a lo largo del film que el verdadero
asesino salta por descarte, si es que no lo adivinaste antes.
El gran responsable de que 88 minutos no funcione como thriller
es el guionista Gary Scott Thompson, quien como antecedentes
cuenta con los primeros filmes de Rápido y furioso
y la serie de televisión Las Vegas. No se podía
esperar mucho más de este tipo
No es casualidad que la película se estrenara con más
de un año de demora en los Estados Unidos (donde casi
termina en dvd) y Pacino se negara a promocionarla.
Tanto él como el director tienen la experiencia suficiente
para saber que este proyecto resultó fallido producto
de un guión pobrísimo. El resto del elenco hizo
lo que pudo.
El maestro del cine clase B, Larry Cohen, en los últimos
años escribió dos thrillers entretenidos que
jugaban con el límite del tiempo como Enlace Mortal
y Celular con mucha más eficacia que este film que
no es precisamente para recomendar. Por los menos no para
gastar 20 mangos en una entrada de cine.
La buena noticia es que el director Avnet y Pacino tendrán
la posibilidad de remendar este trabajo decepcionante en un
par de meses cuando se estrene Righteous Kill, otro policial
que también estará protagonizado por Robert
De Niro.
Por suerte, en este proyecto, el guión corrió
por cuenta de Russell Gewirtz, responsable de El plan perfecto,
de Spike Lee.
Será cuestión de esperar al estreno de ese film
para que el recuerdo de 88 minutos quede en el olvido.