Críticas del Público para "La tercera orilla"

Es una película lenta, pero te atrapa, es aburrida, pero te atrapa, no cuenta nada interesante, pero te atrapa... las escenas se van acumulando, llegó la mitad de la película, no pasa nada interesante pero tenes ganas de saber que final tendrá, suena raro, pero es así,todo para luego saber que no hay final,la historia queda abierta, que suena más a "o sé como terminarla" "que a dejo al espectador que le ponga el final que quiera" malisimo final.

La pelicula me gusto mucho. Disfruté de su ritmo (es verdad, lento pero con sentido) y de las actuaciones. Me gustó el guión, la bronca acumulada de un hijo en relacion a su padre. Hay algunas escenas raras o con agujeros en el relato, pero en lineas generales me parece que es una pelicula para ver y disfrutar.

Por el lado positivo, me pareció una exploración y crítica del varón argentino dominante, que dispone de objetos y personas como mujeres y peones, y hasta de sus hijos, que maneja a su antojo con el dinero. Una figura que existe más en el interior y que en la capital se fue desdibujando, con todo lo positivo y lo negativo que conlleva. Y lo malo, dentro de las actuaciones que en general eran buenas y naturales, el portagonista aparece con apatía forzada. Excesiva e innecesaria lentitud en gral. Karaoke Rezoxvos? Cuesta entender bien la historia, difícil comprender los diálogos que se confunden con los sonidos ambiente y efectos. El cumpleaños de 15 inverosímil, bandera argentina? valsesito?

Esta peli es un típico caso de cine para críticos o de película para festivales. O sea: un verdadero embole No me vengan con que la profundidad de los personajes, ni que la atmósfera densa de la vida pueblerina, ni que la construcción de la cotidianeidad de la gente común, ni con toda esa clase de bolazos. Llamemos a las cosas por su nobre: la peli es un verdadero y fatal embole en el que no pasa nada durante larguísimos minutos y, cuando pasa, uno está tan podrido que lo único que quiere es que todo termine para irse a comer un Big Mac y olvidarse del garrón que se morfó ahí adentro. Un detalle: los actores -no profesionales- son excelentes. Todo lo demás, absolutamente olvidable.