Cada año, en las ruinas de lo que una vez fue Estados Unidos, el Capitolio de la nación Panem obliga a sus doce distritos a enviar un chico y una chica a competir en los Juegos del Hambre. Un castigo distorsionado a raíz de una rebelión pasada y una táctica de intimidación del actual gobierno [...]
La película fue bastante fiel al libro... Sin embargo creo que se hizo mucho incapié en las relaciones sentimentales, derivando la atención de los espectadores hacia el supuesto triángulo amoroso entre los protagonistas, cuando realmente el mensaje del libro es otro. Creo que la elección de los actores para cada papel fue correcta, pudieron captar la esencia de los personajes y lograr la simpatía (o disgusto) del espectador.