Críticas del Público para "Voley"

Espero que se sigan haciendo más de estas películas en nuestro país, con Piroyanski que está en carrera para ser nuestro Woody Allen.

Muy buena pelicula que me sorprendió gratamente. Película de amigos que van a una isla a pasarla bien. Sexo, drogas, y situaciones que se pueden dar en un grupo mixto de varias personas. Cada personaje es único y esta muy bien, al igual que los diferentes gags.

Es una muy buena pelicula cuando uno ve mas alla de las pavadas que hacen los personajes, que son muchas, pero propias de la edad de estos. Evidentemente esta dirigida a un publico joven, hay mucho sexo y drogas, pero siempre todo mostrado con inocencia y humor. Me alegro mucho de que el cine local nos este dando este tipo de cosas. Ojala le vaya bien porque se nota que hay mucha creatividad y huevo detras y delante de las camaras.

6 sonrisas, 18 bostezos e infinitas miradas al reloj. Gags para adolescentes, cortada y por momentos muy lenta como para llevarse el rótulo de comedia. Un bodrio!

Muy buena película argentina, donde se destacan un guión sólido, y buenos trabajos de Piroyanski, Urtizberea, y Darín. Recomendable verla, y apoyar al cine argentino.

Es una buena película, género argentino y con un humor que a mi me representa y supongo que a mi generación. El que la pasa mal es porque no sabe que fue a ver. Es entretenimiento puro, empatía y chistes que no fallan. Todos cumplen con su rol muy bien. Piroyansky es crack, sabe lo que hace y para quien lo hace.

Una comedia que no admite demasiado análisis, porque solo se propone divertir, y lo logra! Por momentos hilarante, gags constantes y verdadero timming de comedia. Para verla, recomiendo!

Voley es una comedia con todas las letras. Su mérito principal es el lenguaje que maneja que es bienvenido en un cine argentino demasiado pacato con el tema sexo y drogas, o tal vez excesivamente solemne. Cosa que en el segundo largo de Piroyanski no sucede. El guión es de relojería, muy buenas actuaciones, mensajes claros y con un ritmo que no decae. Para reirse sin parar, una muy grata sorpresa en el cine nacional.