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Junio terminó muy mal para los cines como se podía esperar con el panorama de los estrenos. De nada sirvió que abril fuera el mejor de toda la historia, posiblemente junio haya sido el peor y compensó.
Se vendieron apenas 3.051.000 entradas según lo que se ve en los reportes mensuales de Ultracine. Esto es una cifra lógica para un mes de febrero y es buena para un mes de octubre o noviembre, pero no para un junio.
Se vendió un 42,8% menos que el año pasado y un 40,6% menos que en junio 2015.
El año pasado se vendieron 5,3 millones de entradas, poco más de 2 millones más que este año, y si consideramos que hubo dos grandes estrenos que se postergaron hasta julio que hubieran sido millonarios, no hace falta mucho más para analizar. Las postergadas fueron Cars 3 que llegará en dos semanas y Transformers 5 que lo hará recién en tres semanas.
Junio fue muy pobre en cuanto a títulos atractivos para los espectadores y como se mostró en este otro artículo las distribuidoras, no los cines, eligieron concentrar más los estrenos en el mes de julio, dejando pobre a junio como hace muchos años no sucedía.
Ahora la gran pregunta es ¿julio podrá darle todo el potencial a los estrenos comprimidos que tiene o las billeterás de los espectadores no tendrán aire y no podrán ver todo lo hubieran visto durante dos meses?
