Es una cifra habitual para las películas animadas en este país, pero no siendo japonesa.
Además hay que recordar que costó mucho que una distribuidora se hiciera de los derechos, porque no había intenciones de distribuirla internacionalmente por parte de sus dueños en Japón. A Diamond Films le costó mucho tiempo para convencerlos.
La película superó los 17 millones de pesos recaudados y seguramente su éxito permitirá que al menos haya más interesados en arriesgarse a traer animé o películas que a priori serían descartadas para su estreno en la Argentina.
