En la década del 80 hubo años donde se vendieron más de 50 millones de entradas. Cuando apareció el VHS y el cable las ventas bajaron a la mitad en los cines de todo el país. Se cerraron salas y aparecieron garages, galerías, iglesias y muchas cosas más, en el mismo lugar donde antes estaban las butacas.
Recién en el año 1997 se comienza a revertir esa historia con la aparición de los multicomplejos. Cinemark Puerto Madero, Village Mendoza, Showcase Haedo o United Artist Morón (hoy Hoyts) se sumaban a las opciones y volvían a conquistar al público.
Este crecimiento tuvo su pico en el 2004 con 42,9 millones de entradas vendidas. Y hasta ahora ningún otro año había sido superior. Hasta este.
Hoy 17 de noviembre del 2012 se está rompiendo ese récord.
Hasta la noche del 16 se habían vendido 42.852.000 entradas informa Ultracine, es decir que el día arrancó a 63.000 personas del récord.
No solo hoy se pasa ese récord. También se habrán vendido más de 43 millones de entradas.
Las vueltas de la vida hacen que esa marca quizás se rompa con alguna adolescente comprando su ticket para el final de la saga Crepúsculo, siendo que quizás hace 8 años ni pisaba un cine.
O también el día es récord justo cuando arranca el Festival de cine de Mar del Plata. Pero no se si el INCAA lo sabrá que se da esa casualidad.
Hoy es un día histórico para la industria de cine en la Argentina.
Los cines deben ser una de las pocas industrias que están creciendo de esta manera en esta época de retracción del consumo en varios rubros. Y no crece tibiamente, está rompiendo récords.
¿Las razones? Varias. Digitalización, títulos, promociones, cambios de hábitos, etc, etc, etc. Ya será analizado en su momento.
El 2012 es el mejor año para los cines en la era moderna. Impresionante.