A pocas semanas del 11 de septiembre de 2001 en los Estados Unidos se estrenó Zoolander. La película fue un fracaso comercial. Seguramente fue porque una comedia no estaba en el ánimo de los norteamericanos en ese entonces.
En la Argentina se estrenó en febrero 2012 y no llegó a los 80.000 espectadores.
Pero la película fue un éxito en los video clubs (unos locales que alquilaban películas en unas cajas negras con cintas), en el cable y cualquier otro sistema que fue apareciendo en los años siguientes, legales o ilegales.
En este 2016 llegó la secuela con chances de vender mucho más. Desde UIP confirmaron que se estrenó en 156 salas de todo el país en los dos idiomas.
Lamentablemente no hubo función de prensa y parece que fue una decisión internacional. Esto suele pasar cuando la película puede estar sujeta a malos comentarios de la crítica.
El público dará su sentencia en breve.
